Rutina de skincare: cómo usarla correctamente según tu tipo de piel

Q: ¿Qué va primero, sérum o crema?

Sérum primero y crema después. Aplica de lo más fluido a lo más denso.

Q: ¿Puedo usar retinol y vitamina C?

Sí, preferiblemente en momentos distintos: vitamina C por la mañana y retinol por la noche.

Q: ¿Cada cuánto reaplico el protector solar?

Cada 2–3 horas si hay exposición continua, sudor o contacto con agua.

Q: ¿La piel grasa necesita hidratante?

Sí. Usa texturas gel o ligeras para mantener la barrera cutánea sin aportar exceso de brillo.

79 Vistas 24/08/2020 0 Comentarios Publicado por: Annally Ahumada Villalba en: Category 1

Una rutina de cuidado de la piel no tiene por qué ser compleja. Lo importante es el orden, la constancia y elegir productos adecuados para tu tipo de piel. En esta guía te explico el paso a paso ideal, cómo combinar activos populares y qué errores evitar para ver resultados reales sin sobrecargar tu piel.

Rutina de skincare: cómo usarla correctamente según tu tipo de piel

Una rutina de cuidado de la piel no tiene por qué ser compleja. Lo importante es el orden, la constancia y elegir productos adecuados para tu tipo de piel. En esta guía encontrarás el paso a paso ideal, cómo combinar activos populares y qué errores evitar para ver resultados reales sin sobrecargar tu piel.

El orden correcto de la rutina (mañana y noche)

Rutina por la mañana

Limpieza suave: gel o crema según tu tipo de piel.
Antioxidante: vitamina C o niacinamida para proteger y unificar.
Hidratante: suero o crema que refuerce la barrera cutánea.
Protector solar: amplio espectro SPF 30 o más. Reaplica si hay exposición.

Rutina por la noche

Doble limpieza si usaste maquillaje o protector resistente al agua.
Tratamiento según objetivo: retinol/retinoides, ácido salicílico (BHA), AHA, despigmentantes.
Hidratante/crema barrera: con ceramidas, escualano o pantenol.

Consejo: aplica del producto más ligero al más denso y espera 30–60 segundos entre capas para mejorar la absorción.

Cómo adaptar la rutina a tu tipo de piel

Piel grasa/mixta: limpiador en gel; niacinamida 4–10%; ácido salicílico 0,5–2% 2–4 veces/semana; hidratantes ligeros tipo gel; SPF con acabado mate.
Piel seca: limpiador cremoso; ácido hialurónico y glicerina; crema con ceramidas y escualano; SPF hidratante.
Piel sensible: fórmulas sin perfume ni aceites esenciales; evita exfoliación agresiva; prueba de parche; busca pantenol y madecassoside.
Piel con manchas: vitamina C diaria; AHA (láctico/mándelico) 1–3 veces/semana; despigmentantes (niacinamida, ácido kójico); SPF riguroso.
Piel con acné: ácido salicílico, retinoides cosméticos o ácido azelaico; evita oclusivos pesados; no manipules los granitos.

Activos clave y cómo combinarlos sin irritar

Vitamina C (AM): antioxidante que potencia el protector solar.
Niacinamida: versátil para poros, manchas y barrera cutánea.
Retinoides (PM): inicia 2 veces/semana y aumenta según tolerancia.
AHAs/BHAs: exfoliación química suave 1–3 veces/semana.
Ácido azelaico: útil para manchas, rojeces y acné leve.

Combinaciones seguras para empezar

Mañana: limpieza + niacinamida + hidratante + SPF.
Noche A (alternar): limpieza + retinol + crema.
Noche B (alternar): limpieza + AHA o BHA + crema.

Evita iniciar retinol y AHA el mismo día si eres principiante.

Errores comunes que frenan resultados

No usar suficiente protector solar o reaplicarlo poco.
Cambiar de productos demasiado rápido: da 6–12 semanas a un activo.
Sobreexfoliar: irrita y empeora la textura.
Olvidar la barrera cutánea: incluye ceramidas, escualano o pantenol.

Cronograma de expectativas realistas

Hidratación y “glow”: 1–2 semanas.
Textura y poros: 4–6 semanas.
Manchas y tono: 8–12 semanas.
Líneas finas: 12+ semanas.

La constancia y el protector solar diario son la base del cuidado de la piel.

Seguridad y prueba de parche

Aplica una pequeña cantidad en el antebrazo o detrás de la oreja 24–48 horas antes de estrenar un activo potente. Si hay enrojecimiento o ardor persistente, suspende y consulta a un profesional de la salud o dermatología.